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miércoles, 10 de noviembre de 2010

EL VIAJERO

Arturo viaja al volante de su Mercedes, con las ventanillas bajadas, fumándose un Camel americano y cantando a pleno pulmón una de Bon Jovi. A pocos metros de su vista, y sin previo aviso, aparece un peaje que juraría no haber cruzado nunca antes. Al detener el auto, comprueba que en realidad se trata de un puesto fronterizo. Un policía le sale al paso, saluda atento y le solicita la carta de invitación para pasar la frontera, el visado, un certificado de penales y una declaración jurada de encontrarse libre de cargas. Arturo, perplejo y confundido, abre la guantera para buscar allí alguno de esos papeles que estaba seguro no tenía. De reojo observa al agente, y cree apreciar algo extraño a ambos lados de su espalda. Vuelve a buscar en la guantera. Al fin encuentra un papel con un sello oficial estampado al pie. Con cierto alivio lo entrega al hombre uniformado, oyendo como éste último le dice: “Esto, caballero, no es más que su certificado de defunción. Lo lamento, pero usted aquí no puede estar. ¡Váyase al infierno!”

43 comentarios:

AGUS dijo...

Divertido. La verdad es que no me esperaba ese final. Pero todo encaja, un puzzle a medida. Me gusta, ya lo sabes, ese humor negro con cierto puntito canalla. Otra cosa, he visto que no tienes e-mail en el perfil. Si puedes, envíame un e-mail (lo encontrarás en el perfil de mi blog). Tengo que hacerte una propuesta.

Un abrazo.

Jesus Esnaola dijo...

Muy bien Maite, me ha gustado mucho. Mantienes muy bien el suspense y al final lo haces cuadrar todo. El giro humorístico es estupendo, yo personalmente que tiendo más al drama, agradezco en especial ese sentido del humor.

Muy buen micro.

bicefalepena dijo...

Final inesperado y lógico. Para alguien que va en un Mercedes, con las ventanillas bajadas, escuchando a Bon Jovi y fumando y cantando a la vez. Tantas cosas juntas, o son un sueño o terminan en tragedia...
Me ha gustado mucho,
Un abrazo

Torcuato dijo...

Que mejor forma de entrar en el cielo que montando en Mercedes, fumando Camel y oyendo a Bon Jovi.
Un beso Maite.

Torcuato dijo...

Me da la sensación que el tío se estrella por el despiste de ir fumando y escuchando música.
Un beso.

Ángeles Sánchez dijo...

Me encanta la frase " Esto, caballero, no es más que su certificado de defunción", como quitándole importancia al hecho de su muerte.
Buen micro Maite

Anita Dinamita dijo...

Pues si no quiere ir al infierno, tendrá que probar a ser un sin papeles en el cielo... y cruzar la frontera con su Mercedes, Bon Jovi y el cigarro, saltándose el paso del agente.
Genial Maite... lo que parecía un sueño nos pega una bofetada al final
Abrazos

Maite dijo...

AGUS: pues eso es bueno, que te diviertas leyéndolo, a fin de cuentas, la lectura, el cine, el teatro y otras actividades culturales, tienen como fin el entretenimiento.
Un abrazo grande.



JESUS: no te creas Jesus, yo misma me estoy sorprendiendo, porque siempre he tirado más por el drama, me salía más "de corrido", por eso me propongo retos realizando también otros registros. Me alegra mucho que te haya gustado. Un fuerte abrazo.

Maite dijo...

BICEFALEPENA: Jejeje, buena reflexión, y muy en tu línea (o es un sueño=alegría / o acaba en tragedia=pena) Un beso.


TORCUATO: efectivamente es una buena manera de entrar en el cielo, lo que pasa es que al tipo no le dejan entrar, los motivos para denegarle el acceso, sólo el los sabrá.
Tal vez tengas razón y se pegó un piñazo por ir a otras cosas. No se me había ocurrido, pero es una buena interpretación. Un beso.

Maite dijo...

ANGELES: normal que le quite importancia, el angelito está muy acostumbrado a ese tipo de papeles ;-) Pensaba que ibas a decir que te había gustado la frase "váyase usted al infierno", porque a mí hay tantas veces que me apetece decirlo... :-D


ANITA: Has captado bien el mensaje escrito entre líneas, Anita, buen comentario. Un beso.

Anónimo dijo...

Sorpresivo y auténtico...Eso sí, me has roto todos los esquemas: tener que imaginarme a un San Pedro con uniforme y gorra de plato mandándolo "al infierno" ha sido todo un trauma. Si la entrada al cielo es tal como lo cuentas, yo prefiero mil veces el infierno (jajajaa...)

Un beso enorme, mi ingeniosa.

Un beso enorme.

Anónimo dijo...

Muy excelente, Maite. Lo apunto enseguida en mi lista de preferidos.
Abrazos admirados,
PABLO GONZ

Ángeles Sánchez dijo...

Vaya, no pensé en un ángel...reconozco que la memoria me ha jugado una mala pasada...el papel que exitende el hombre me llevó hasta un relato que escribí hace unos años, donde un hombre acude a casa de una psicóloga enseñándole su certificado de defunción futuro...

Saludos desmemoriados

Nel Morán dijo...

Me parece que sale ganando al ir al infierno porque en el otro lado...

Estoy completamente de acuerdo con Pablo.

Blogsaludos

Julio Genissel dijo...

Bien, creo que Anita ha dado en clavo. Las personas no son lo que son, sino lo que dicen sus papeles; o en tal caso el señor "ricachón" no contaba con los requisitos para entrar al cielo, y ya. Pero la realidad es que si pensamos que el ingreso de migraciones es por ejemplo el de un aeropuerto de España o Francia y si el señor es por ejemplo sudamericano, o africano, comienza a tener más peso real. Para mucha gente estos países son el Paraíso y el propio el Infierno, y el guarda fronterizo un San Pedro, que obedece órdenes, y olvidando que también sus pueblos fueron inmigrantes en otros momentos, sencillamente no lo deja pasar. Abrazo.

Maite dijo...

LUIS/POEMASDELACARPETAAZUL: lamento haberte dado esta noticia, pero ya que estás con el disgusto puesto, te contaré que Papá Noel, tampoco existe :-p
Un abrazote



PABLO GONZ: un auténtico honor que lo metas en el cajoncito etiquetado como "favoritos" Un fuerte abrazo

Maite dijo...

ANGELES: pues los recuerdos te jugaron una mala pasada, en efecto, porque el pobre hombrecito estaba ya muerto en el presente.
Te pongo deberes: volverlo a leer ;-)
Un beso

Maite dijo...

ADIVÍN: pues allá donde estemos, ¡que no decaiga la fiesta! ;-)
Un abrazo grande


JULIO GENISSEL: bien, bien, Julio, me gusta las múltiples interpretaciones. Esta que haces tú, está de rabiosa actualidad. No digo nada para que cada uno pueda hacer su propia lectura.
Un abrazo

Propílogo dijo...

Genial última frase. La sacudida de la obviedad. ¿Qué otra cosa podría decirle?
Saludos.
Gabriel

Lola Sanabria dijo...

Certificar lo que certifica un certificado a quien no se ha enterado, o no quiere darse por enterado. Me gustó mucho.

Besos al cubo

Stewart dijo...

Muy, muy bueno maite, una de esas novelas que te tienen con la incertidumbre hasta la última página en la que todo encaja, y es entonces cuando te pones a releer a ver si le encuentras algún resquicio porque:

¿Cómo no me he dado cuenta antes?

El micro de hoy es una especie de "sexto sentido" en 13 maravillosas lineas.

Un abrazo.

PD: y..como en el sexto sentido, el prota está muerto!!!!

R.A. dijo...

Es muy bueno Maite por todos los motivos que te han dicho y porque como le pasa a Jesus yo agradezco mucho el humor del bueno en los micros(tengo que probar esa vertiente que estoy muy dramática últimamente)

Un abrazo

Maite dijo...

PROPÍLOGO: esa última frase es el bofetón que saca al lector de la fantasía para traerlo hasta la realidad. Bienvenido, Gabriel, un gusto contar contigo aquí.



LOLA: Te salió poético el comentario. Recojo tus besos del cubo y me los quedo, si no te importa ;-)
¡Abrazos!



STEWART: me ha gustado muchísimo tu comentario. No había caído, es verdad que en ocasiones veo muertos :-D
Un fuerte abrazo



ROSANA: pruébalo, de verdad, es una terapia estupenda, el humor siempre sienta bien. Como le he dicho a Jesus, yo también tiendo a la dramatización, pero he descubierto que me divierto mucho escribiendo este otro tipo de relatos.
Un abrazo fuerte

Julio Genissel dijo...

Maite, hice una interpretación por analogía. Y es que me siento muy inhibido de hacer una crítica directa, porque el tono general de los comentarios no es de observaciones sobre la estructura, tensión o características de los relatos, sino que son más bien coloquiales y familiares. Cuestión que en general noto en los blogs y respeto, pero estoy convencido no ayudan al crecimiento del autor. Desde “el romance del enamorado y la muerte” hasta aquí hay muchísimo para decir sobre el encuentro del hombre con la muerte. Tal como lo hay sobre la forma en que se cuenta ese encuentro que no necesariamente es final. Así que “meto violín en bolsa”, y perdón por haber intervenido otra vez. Un abrazo.

Antonio Eme dijo...

Genial¡ Una estupenda micronovela de género negro (género que, por otra parte, me encanta)
Esta la guardo para releerla/redisfrutarla ;-)

Maite dijo...

JULIO: no tengo nada que perdonarte, tú y quien quiera, puede pasarse una, dos, tres, cuatro o un millón de veces por el blog, esta es vuestra casa, y así os tenéis que sentir al venir aquí.
La libertad de expresión, y por tanto, de crítica, está más que permitida por aquí, así que te ruego que no te sientas para nada cohibido.
Hay muchos compañeros que critican mis micros (en el buen sentido de la palabra), y a mí me encanta, siempre que sea hecho desde el respeto y el entendimiento. Unas veces estaré más de acuerdo y otras menos, como es normal.
Un fuerte abrazo y...espero tus comentarios.

Maite dijo...

ANTONIO M.: es apasionante el mundo de la novela negra, y aunque yo no lo domino para nada, siempre es bueno experimentar nuevos campos, aunque este micro no se si tiene mucho de ello ;-)
Te lo puedes llevar para releerlo cuantas veces quieras, sólo hay un fallo, y es que serás conocedor del final, pero no se puede tener todo!
Un abrazo y muchas gracias por venir, espero que seas reincidente y vuelvas a caer en la tentación de leerme.

Julio Genissel dijo...

Maite, entonces, te daré mi humilde opinión. A diferencia de otros que he leído en este sitio este no me ha gustado. Y la razón es que es demasiado obvio. No alcanza a ser humorístico ni tampoco llega a desopilante. Cuando el policía le pide los papeles el cuento termina, el resto es absolutamente predecible. El lector no necesita que el policía tenga algo en la espalda para darse cuenta de que el hombre ha entrado a una dimensión diferente e inesperada. Y por otro lado parece una escena Simpson: el policía con dos bultos que son alas tapadas (¿para qué?). El recurso de la burocracia para el ingreso al mas allá está demasiado usado y de refritarlo debería ser de forma o más sutil o más grotesca, nunca tan directa. Por último la frase del final “Váyase usted al infierno”, no encaja, ¿la está diciendo un ángel? El doble sentido de echarlo y a la vez mandarlo a su destino final no está mal, pero con esa frase, nuevamente tan obvia se malogra. En fin, es un encuentro que da para muchísimo más. Si te digo todo esto es porque me parece que desentona con otros textos que has logrado. Un abrazo

Kum* dijo...

Me estás quitando las pocas ganas de morirme que tenía. No me jodas que también hay fronteras en la muerte!!!

Me vais a perdonar pero me cisco en todas las fronteras... en todas. Tengo mis razones.

...¿ves lo que me haces decir? (buenísimo el relato, maldita).

Un beso sin papeles.

David Moreno dijo...

Me hizo sonreír esta mañana, jeje Nos llevas por un lado y al final nos descubres ese final humorístico.
Como siempre. Bueno de verdad.

Un saludo indio

Juan F. Plaza dijo...

Ese punto macabro es parte de tu encanto, Maite. ¿Qué canción de Bon Jovi iría cantando el "caballero"?
Abrazos

Maite dijo...

JULIO: me alegra mucho que de verdad hayas puesto lo que piensas del micro, que por lo que veo, dista bastante de lo que pusiste en el primer comentario. Pero este me gusta mucho más, porque es el real :-D
Ahora vamos por partes. Lo primero es decirte que con no pretendía hacer un micro desopilante, ni mucho menos, si no tan sólo algo en tono irónico, que es mi forma de hacer humor (también en la vida real).
Por otro lado, he intentado hacer el ejercicio de cortar el micro en la frase que tú dices "...declaración jurada de encontrarse libre de cargas" y debo confesarte que al menos yo (ni aún siendo la autora), consigo ver tan obvio el desenlace final, claro que estoy de acuerdo en que lectores avezados y que leen muchos micros, tal vez puedan llegar a imaginárselo.
Lo de la escena Simpson, me ha hecho mucha gracia, y los he imaginado a todos amarillos :-D
Sobre las obviedades, te diré que te doy en cierto modo la razón. Pero veo en ti demasiados conceptos preconcebidos, ¿por qué presupones que las alas estaban tapadas? ¿no podría ser que como el "rango" del angel era bajo las tuviera tan pequeñitas que a penas se le vieran? Y, sobre que no encaja la frase "váyase usted al infierno" en boca de un ángel, veo que aquí también tienes un juicio sobre algo que jamás hemos visto (al menos yo no), pero a mi entender no todos los ángeles tienen por qué ser buenos por definición.
Tienes mucha razón en que el tema del fin de la vida y a dónde vamos, es un asunto reiteradamente tratado, incluso hasta muy manido, tal vez no haya logrado hacer una interpretación brillante del hecho. Sólo quise aunar ese momento celestial con el mismo momento terrenal que mucha gente también está viviendo.
En fin, Julio, que es normal que el micro no te guste, y que prefieras otro tipo de textos. Lo acepto y lo asumo. Desde luego aquí estamos para aprender y para mejorar, y eso nunca deja de hacerse a lo largo de toda la vida.
Espero que sigas visitándome y dándome tu opinión sincera. Lo dicho, esta es tu casa.
Un abrazo.

Maite dijo...

Kum*: pues no sabes lo que me alegro de haberte quitado las pocas ganas que tenías :-D
Con eso de "maldita" creo que ya me estás enviando a los infiernos!!
Un beso sin traspapelar



INDIO: pues no sabes como te agradezco hoy haberte arrancado esa sonrisa. Es un efecto espejo, porque la tuya ha provocado la mía.
Un abrazo, David.



WOODY: ese puntito macabro, es el puntito canalla que nunca hay que perder (en mi opinión). La canción estoy segura que sería It's my life
Un abrazo

Claudia Sánchez dijo...

Hola Maite! Tú sabes que soy un poco dura con las críticas, es que para mí son fundamentales para crecer y solo se aporrea lo que se aprecia. Me gustaría que hicieran lo mismo conmigo.
Yo disiento con Julio. Si no hubiera leído los comentarios, no sé si me resultaba tan claro todo. Ahora, sabiéndolo, busco las pistas claves. Y lo único que me indica qué sucede, es el agente con algo extraño a sus espaldas (que a primera lectura no interpreté) y la frase final del infierno (por lo fuera de lugar en la situación) Y así y todo, me queda más la sensación de que está por ingresar a un país de bizarros cabrones, acostumbrados a los fantasmas y otras especies, que al cielo. En mi opinión, claro está.
Sí me gusta la analogía de los requisitos para el ingreso con nuestra realidad. ¡Que el cielo y el infierno se apiaden de nosotros, a ambos lados de la frontera!
Saludos Maite!

Julio Genissel dijo...

Maite, yo creo que lo maravilloso del foro es que puede darle al escritor la posibilidad única (que jamás le dará el papel) de tener una respuesta directa del lector. Esto también incluye el ver como su texto se ve completado por la opinión de los demás. Es una opción que me parecería un error desaprovechar. Solo te comento que no solo yo, todos leemos con preconceptos, los que ha dejado en nosotros la cultura, la educación, y en el caso de los textos, especialmente todo lo que han dejado las lecturas que hayamos realizado. Es por eso que cuanto más lees (no solo micros) más prevés, adivinas y exigís. Queda aclarado, y sin duda voy a seguir leyéndote. De paso te invito a dejar una metáfora o figura literaria en metaforario.blogspot.com. Una construcción de metáforas producidas por el foro. Pronto llegaremos a 500, todas a disposición de quién escriba o se deleite leyendo, te aseguro, opiniones muy diversas sobre un mismo tema. Un abrazo. ¡Ah! Y si tenés ganas de leer un encuentro con el diablo, en el que está usado el recurso de la burocracia: http://azullavable.blogspot.com/2010/10/el-encuentro.html

Maite dijo...

CLAUDIA: ya sabes que espero tus comentarios como agua de mayo. Y has podido comprobar en muchas ocasiones que los tengo en cuenta. A ver, me explico, que no me he expresado bien, SIEMPRE los tengo en cuenta, pero a veces hago cambios en el micro inicial derivados de lo que tus reflexiones me han podido aportar.
De todas formas, en esta factoría de ficción los resultados son sorprendentes y te das cuenta que hay lectores para todos los gustos.
Gracias por venir, comentar, leer y releer para entender.
Un beso

Maite dijo...

JULIO: en efecto, esa es la magia de este medio, que interactuamos unos con otros, y que el lector tiene la posibilidad de expresar directamente su opinión o sus sensaciones al autor.
Y por supuesto, me encanta que los micros sean completados por interpretaciones, nuevos finales, o evocaciones de índole particular del lector.
Voy inmediatamente a leer el cuento que me referencias en tu comentario y también aceptaré la propuesta de metaforario.
Un abrazo, Julio

vittt dijo...

la burocracia es para siempre.
se le quitan a uno las ganas hasta de morirse.

Maite dijo...

VITTT: ya ves, ni vivo ni muerto dejan de empapelarte.

Lorena dijo...

Me gustó la doble intención en la frase final del ángel: "¡Váyase usted al infierno!”. Nosotros leemos un insulto pero el ángel simplemente podría estar indicando una dirección. Saludos!

Maite dijo...

LORENA: Ese es un recurso muy utilizado en este género y que suele dar buenos resultados. Me alegro que a ti te haya gustado. Un abrazo.

Juan Vásquez dijo...

hey, está muy muy bueno! que bueno leerte

Maite dijo...

JUAN VASQUEZ: lo realmente bueno es tener lectores como tú, que no se quedan en una primera impresión, y que leen más para conocer verdaderamente al autor. Un fuerte abrazo.